Esta lección enfatiza la autoridad que los creyentes tienen en Cristo como aquellos que caminan en el camino de Su presencia. Esta intimidad que exploramos en la lección anterior conduce a la autoridad para actuar en el nombre de Jesús, destacando nuestro llamado a buscar a los perdidos y vencer las obras del Diablo. A través de las Escrituras y la morada del Espíritu Santo, estamos equipados para proclamar el reino de Dios, sanar a los enfermos y mantenernos firmes frente a la oposición espiritual. Arraigada en la verdad de la Palabra de Dios, nuestra autoridad se sostiene adorando únicamente a Dios y rechazando cualquier cosa que se exalte por encima de Sus propósitos. Como personas de Su presencia, no caminamos en especulación, sino en la revelación de lo que Cristo ha logrado.

Objetivos

Esta lección tiene como objetivo equiparte para:

1. Explicar la conexión entre la intimidad con Dios y la autoridad espiritual, reconociendo cómo el Espíritu Santo capacita a los creyentes para llevar a cabo la misión de Jesús.
2. Analizar ejemplos bíblicos clave, como Elías en el Monte Carmelo y Jesús en el Monte de la Tentación, para comprender la naturaleza de la autoridad espiritual y cómo se ejerce frente a la oposición.
3. Aplicar los principios de autoridad en Cristo para resistir la tentación, mantenerse firmes en la fe y dar testimonio audaz a otros, encarnando la presencia y la Palabra de Dios en su vida diaria.

Lectura

Mientras te preparas para avanzar en esta lección, te animamos a leer el Capítulo 4, “Autoridad,” en el libro de Paul Bergin, El Camino de la Presencia: Un Discipulado para Habitar con Jesús (Slingshot, 2024).